Renta bruta vs renta neta: ¿cómo se calculan y cuál es la diferencia?
La renta bruta es el precio puro acordado en el contrato de arrendamiento, mientras que la renta neta tiene en cuenta los gastos operativos asociados a la estructura y representa la renta final que recibe el inversor. En este artículo, te explicamos la diferencia entre ambos conceptos y cómo se calculan dentro de la inversión en tierras productivas.
¿Qué es la renta bruta?
La renta bruta se refiere al precio base pactado en el contrato de arrendamiento del campo. Este valor es el punto de partida para estimar los ingresos que un inversor podría obtener al arrendar un campo en Landtoken. El cálculo de la renta bruta es el más sencillo y directo, por lo que resulta fácil de comprender. Este es el primer paso para determinar la rentabilidad de la inversión.
¿Qué es la renta neta?
La renta neta, por otro lado, es el monto final que el inversor recibe tras descontar todos los gastos operativos y otros costos relacionados con la administración del campo. Es decir, la renta neta es la renta bruta menos los costos asociados a la operación del campo, y es el valor que efectivamente recibe el inversor.
Costos asociados a la renta bruta
Para obtener la renta neta, se deben aplicar ciertos costos sobre la renta bruta. Los costos más importantes son los siguientes:
- Impuestos aplicables: Esto incluye impuestos como Bienes Personales (BBPP) e Ingresos Brutos (IIBB), entre otros, que afectan la rentabilidad.
- Honorarios del fiduciario: Los costos relacionados con la administración del fideicomiso que gestiona el arrendamiento.
- Fee de administración: El costo por los servicios administrativos de la plataforma o empresa que facilita la inversión.
- Estudio jurídico, contable e impositivo: Los honorarios por los servicios profesionales relacionados con la gestión legal, contable y fiscal de la inversión.
- Auditorías externas: Los costos de las auditorías realizadas para garantizar la transparencia y legalidad de la operación.
Conclusión
La renta que finalmente reciben los inversores es la renta neta, que resulta de descontar los costos operativos y otros gastos asociados a la operación del campo. La renta neta es el valor que efectivamente se obtiene de la inversión después de considerar todos los costos involucrados.